Jessica Rodríguez aseguró en el Supremo que todos los meses iba a viajes oficiales y nunca abonó nada: «Siempre lo ha pagado Ábalos»
Relató también ante el magistrado que era el asesor del ministro, Koldo García, quien lo gestionaba todo, «hasta si tenía que ir a comprar tabaco o le hacían falta medicamentos»
Aldama, sobre los contratos de Jessica en Ineco y Tragsa: «Ella los exigió para seguir con él y él lo hizo libremente»

Jessica Rodríguez, la ex pareja sentimental del exministro socialista José Luis Ábalos, reveló durante su declaración como testigo el pasado día 27 de febrero en el Tribunal Supremo que acompañaba al político en sus viajes oficiales, todos los meses durante el tiempo que duró ... su relación, y nunca abonó nada, ni billetes ni comidas ni hoteles.
«No, nada. En principio, siempre lo ha pagado el señor Ábalos, excepto cuando lo gestionaba Koldo», relató según la transcripción de su comparecencia a la que ha tenido acceso ABC. Eso sí, negó que ella recibiera ningún dinero por acompañarle. «Eso es completamente falso».
Sobre el piso en el que ella residió durante tres años, entre 2019 y 2022, en la céntrica Plaza de España de Madrid y que habría pagado el empresario Víctor de Aldama presuntamente en concepto de comisiones, dijo que fue ella quien lo eligió por su ubicación, cerca de la sede socialista de la madrileña calle Ferraz y su universidad y que «imaginaba» que lo estaba pagando el exministro, en coordinación con su asesor Koldo García porque era él quien lo gestionaba todo, «hasta si tenía que ir a comprar tabaco o le hacían falta medicamentos. Si Koldo le llevaba unas flores, sabía que eran del político, aseguró.
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«Me dijo que ya tenía una edad para compartir piso»
«A mí el señor Ábalos me dijo que yo compartía piso con mis compañeras y que ya tenía una edad para estar compartiendo piso, porque además nosotros nos veíamos todas las semanas», explicó Rodríguez. «Me dijo que cogiera una casa, que a mí me gustara, y yo cuando vi esa me gustó».
«El señor Koldo fue el que se puso en contacto conmigo y me dijo que el día de la visita yo tenía que quedar con un tal Alberto», prosiguió, refiriéndose a Alberto Escolano, uno de los socios de Aldama. «Pensé que era la persona de la inmobiliaria que me iba a enseñar la casa, pero allí vi que no, había otra inmobiliaria, o sea que había otra persona que era la que nos estaba enseñando el piso».
«Tuvimos una relación sentimental, éramos pareja»
Sobre su relación con Ábalos, a preguntas del magistrado Leopoldo Puente, explicó: «Nosotros, al principio de conocernos, tuvimos una relación sentimental, éramos pareja dentro de lo que yo entiendo, y aunque él estuviera casado solamente compartía techo con su mujer por sus hijos, y yo creo que nuestra relación era una relación monógama, dentro de un una relación aunque lo compartiera, con su familia techo. Realmente, nosotros teníamos una relación de pareja, una relación sentimental», relató al juez entre lágrimas, ante lo que el magistrado interrumpió: «Tranquilícese, y cuando deje usted de llorar y esté tranquila, reanudamos».
«Me dijo que mientras fuera ministro no se iba a divorciar»
Su relación con el ministro terminó de mutuo acuerdo porque ella reclamaba exclusividad. «Me dijo que como iba a haber elecciones en noviembre, que mientras fuera ministro no se iba a divorciar porque eso era un escándalo, y yo no creo que tuviera que ser el segundo plato de nadie», relató Rodríguez.
Y aún así, ella siguió disfrutando del piso de Plaza de España gratis. «A ver, él lo que me dijo fue que mientras yo estuviera estudiando la carrera, pues que yo siguiera tranquilamente en la casa, o sea, yo entendí como que él me había fallado».
«Le mandé por WhatsApp mi currículum a Ábalos»
Preguntada por el magistrado por el puesto que acabó ocupando en la empresa pública Ineco, explicó que fue el exministro quien le sugirió que buscara empleo. En esas fechas ella estaba en la universidad, Ábalos «a veces» le daba dinero en metálico y con eso iba pagando sus estudios.
«Yo en ese momento de mi carrera no tenía todas las asignaturas que debía de tener y y el señor José Luis Ábalos me dijo que sería bueno para mí que mientras estaba estudiando la carrera estuviera trabajando y entonces le di mi currículum, se lo mandé por WhatsApp y a finales de febrero» la llamaron por teléfono.
«¿Pero le llamaron por encargo del señor Ábalos?», preguntó entonces el magistrado Leopoldo Puente, a lo que ella contestó: «Yo imagino que sería por eso, porque yo realmente no había echado currículum en ningún sitio, solamente le di mi currículum a él«.
En lo que respecta a la entrevista, dijo que fue «muy sencilla», era de auxiliar administrativa y, por entonces, tenía 30 años, un grado superior y estaba estudiando tercero de carrera. «Solamente necesitaba tener conocimientos de Office y los tenía», aseguró. Ella nunca fue a trabajar, a pesar de cobrar más de mil euros al mes. Su jefe era el hermano de Koldo García, Joseba. «Yo le pregunté en alguna ocasión, si necesitaba algo, si lo que fuera y él me dijo que estaba todo bajo control y que no necesitaba nada«, reveló. Le dieron un ordenador que solo utilizó para hacer el curso de riesgos laborales.
Cuando le venció el contrato empezó a trabajar en otra empresa pública, Tragsatec. Era marzo de 2021. Aquí, directamente, no hizo ni entrevista. Estuvo seis meses «aproximadamente» y cobraba unos 1.100 euros al mes.
Sobre su relación actual con Ábalos, Rodríguez aseguró que la última vez que lo vio fue en julio de 2021. «Fue tan sonado lo del cese de él, que lo vi en mis redes sociales, y ese día le escribí para preguntarle que qué tal estaba, que como se encontraba, que, bueno, que me imaginaba que había sido un palo muy grande para él y me dijo que estaba solo Madrid y que si quería que nos tomáramos algo y hablábamos, y ese fue el último día que le vi».
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