El Ángel de la Historia
Coincidiendo con el 80 aniversario del final del dominio nazi, los Museos Estatales de Berlín recordarán, en mayo, a Walter Benjamin, Paul Klee y los ángeles de la capital alemana

La rendición de la Alemania del III Reich de Hitler ante los aliados y la liberación de Europa del dominio nazi cumple 80 años. El 8 de mayo de 1945, día de la Victoria en Europa, la Segunda Guerra Mundial llegaba a su fin. Coincidiendo ... con la conmemoración de ese día, se inaugurará en Los Museos Estatales de Berlín, uno de los más grandes centros de arte del mundo, fundados por el Rey Federico Guillermo III de Prusia con el nombre de Museos Reales de Berlín, una extraordinaria exposición: 'El Ángel de la Historia. Walter Benjamin, Paul Klee y Los Ángeles de Berlín 80 años después de la II Guerra Mundial'.
La obra clave de esta muestra será 'Ángelus Novus' (1920) del artista suizo Paul Klee (1879-1940), que sale del Museo de Jerusalén de manera excepcional para ser expuesto en Berlín. La llegada de esta carismática obra vendrá acompañada de otras pinturas de ángeles, procedentes de museos berlineses que sobrevivieron a la IIGM. Lo que hace tan particular a esta acuarela, de 31,8 por 24,2 centímetros, es que fue propiedad del filósofo alemán, de origen judío Walter Benjamin (1892-1940). Benjamin adquirió la obra en Múnich, durante una visita a su amigo Gershom Scholem en 1921, y la poseyó hasta su muerte.
La importancia de esta obra en la vida de Benjamin fue de tal magnitud que le acompañó en su exilio, gracias a la ayuda de una amiga que le llevó el cuadro a París en 1935. El filósofo había tenido que escapar de su Berlín natal, al cual no volvería, huyendo de una Alemania en la que habían estallado las persecuciones a los judíos y marxistas. Pero en 1940, cuando el avance de las tropas nazis estaba llegando a París, Benjamín metió sus papeles y el cuadro desmontado del marco en una maleta y se la entregó a George Bataille, que la depositó en la Biblioteca Nacional huyendo precipitadamente del país rumbo a España.
Walter Benjamin se quitó la vida en nuestro país, concretamente en Port-Bou, el 26 de septiembre de 1940. Se suicidó ingiriendo una dosis elevada de morfina en el Hotel Francia en el que se albergaba. Tenía 48 años cuando murió. Había llegado desde la localidad francesa de Port Vendres con un grupo que le acompañaba. La intención que tenía era la de cruzar los Pirineos y así poder llegar hasta Portugal y embarcar rumbo a Estados Unidos.
Para ello, su fiel amigo el filósofo alemán Theodor Adorno le había conseguido las visas necesarias de tránsito en España y de entrada en Estados Unidos, para poder reunirse con él. Pero le faltaba el permiso de salida de Francia. Por tanto, las autoridades de esta localidad española fronteriza con Francia amenazaron a Benjamin con deportarle a Francia. Ante el miedo a ser entregado a la Gestapo, no pudo soportarlo y precipitó su muerte.
Miedo a ser deportado
En un testamento de años pasados, la voluntad de Benjamin era que el cuadro fuera entregado a Adorno, que lo recibiría en Estados Unidos después de la guerra. Posteriormente, Adorno se lo entregó a Scholem en Frankfurt, y éste lo donaría al Museo de Jerusalén, de donde ha salido para esta excepcional muestra.
En uno de sus últimos escritos, 'Tesis sobre la filosofía de la historia', Benjamín compuso un texto sobre el ángel representado en la obra de Paul Klee, del que hace una interpretación muy peculiar, un tanto nublada, al que percibió como el Ángel de la Historia. En la exposición también contará con los manuscritos de este texto de Benjamin procedentes de la Academia de Artes de Berlín.
En su libro 'Discursos interrumpidos I', Benjamin da su propia interpretación sobre el 'Ángelus Novus' de Klee. Un ángel que está como a punto de alejarse de algo que le tiene pasmado. El ángel de la historia que observa con la boca abierta y las alas extendidas, con su rostro mirando hacia el pasado, «una catástrofe única que amontona incansablemente ruina sobre ruina, arrojándolas a sus pies. Bien quisiera él detenerse, despertar a los muertos y recomponer lo despedazado». Pero, sigue relatando Benjamín, «un huracán le empuja hacia el futuro, al cual da la espalda, mientras que los montones de ruinas crecen ante él hasta el cielo. Ese huracán es lo que nosotros llamamos progreso». El tiempo como progreso será criticado por Benjamin. Walter Benjamin fue una mente brillante, que desarrolló una extraordinaria carrera intelectual con un pensamiento apasionado y agudo. Fue considerado uno de los críticos literarios más importantes de su tiempo, aunque su vocación principal fue la filosofía.
El aura
Una de sus obras más reconocidas, 'La obra de arte en la época de la reproductividad técnica', fue un aporte inestimable a la teoría estética, pues planteó problemas de la filosofía del arte de corte metafísico. El concepto de aura recogido de la tradición mística, los procedimientos de reproducción fotomecánica o el cine son tratados en esta obra llena de descubrimientos.
Además, se proyectarán fragmentos de la película de Wim Wenders 'El cielo sobre Berlin' (1987). En ella dos ángeles vigilan el Berlín dividido. Se hace referencia a la acuarela de Klee y a la interpretación que Benjamin hace de la misma.
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