Suscribete a
ABC Premium

EN OBSERVACIÓN

Cómo cantar gol con perspectiva de género

Una aproximación de oídas a la locución femenina de la Eurocopa

Un rey minúsculo para TVE

Estadios de ánimo

Jesús Lillo

Esta funcionalidad es sólo para registrados

La crisis apenas se notó. Tres años después de admitir alumnas y dejar atrás su secular modelo de segregación, el colegio de San Ildefonso puso en 1984 a sus niñas a cantar los números y los premios del sorteo de Navidad. Sin cambios hormonales, ... ángeles sin sexo, manos y gargantas inocentes, las voces de unos y otras venían a sonar muy parecidas. Junto al sorteo de cada 22 de diciembre y las campanadas de Año Nuevo –también cantadas, a veces atragantadas–, la tercera pata emocional que aún sostiene la nación española es la selección de fútbol, cuyos goles berrean unos locutores que han hecho de sus proezas vocales, gallos incluidos, un género con entidad propia, tradicionalmente ejecutado por hombres, con gran alarde de ardor guerrero, virilidad orgásmica y capacidad pulmonar, hasta rozar la afonía y la demencia, estadios en los que se puede situar la cumbre artística de este asombroso ejercicio de vindicación patriótica y sacrificio cognitivo.

Artículo solo para suscriptores

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación