Vicente Azpitarte: «El CSD tiene en su mano paralizar el conflicto de la pelota vasca hoy mismo»

Estas preguntas también se las plantea Vicente Azpitarte (Granada, 1983), portavoz de deportes del Partido Popular en el Senado, quien exige a José Manuel Rodríguez Uribes, presidente del CSD, acciones concretas en defensa de la Federación Española y contra la oficialidad de la selección vasca.

Noticia Relacionada

Amenazas a España si veta a la federación vasca de pelota

Javier Asprón

El presidente de la Internacional presiona con expulsar a la FEP si no retira el recurso que presentó ante el TAS

-¿Cuál es la postura del Partido Popular en este conflicto?

-Lo primero, situamos a España por delante, algo que este Gobierno no está haciendo. Este problema surge de la redacción y las enmiendas de la Ley del Deporte y de su artículo 48, cuyo primer punto deja claro que la representación internacional de las selecciones depende de las federaciones nacionales. Es cierto que hay un segundo apartado en el que los socios independentistas del Gobierno lograron incluir la posibilidad de que las federaciones autonómicas puedan ostentar la representación si las federaciones internacionales lo aprueban. El mal nunca descansa. Pero a veces, de repente, surge una vocecita en lo más profundo de nuestra conciencia. Y entonces incluyeron aquella frase de que para ello tendría que autorizarlo el CSD. Y en eso estamos. Todo está en manos del presidente del CSD, que es quien debe autorizar en última instancia que una federación autonómica compita en el plano internacional. Si hay polémica es porque aún no ha dicho que todo lo ocurrido en los últimos meses no es viable. Solo tiene que alzar la voz y decir que no lo autoriza.

-El caso es que no lo dice.

-No, por dos razones. Primero, porque lo ha pactado con sus socios. Y segundo, porque está intentando impedir que la Federación Española de Pelota ejerza sus derechos de defensa en este caso. Y yo, sinceramente, expreso toda mi solidaridad con esa federación, que no está encontrando en el CSD ni en el Gobierno el aliado y defensor que necesita.

-Desde la Internacional se amenaza a España con su expulsión si no retira el recurso al TAS. Además, el pasado fin de semana la Federación Vasca ya no permitió competir a pelotaris riojanos en un torneo regional por no plegarse a sus posiciones.

-Si ya es difícil explicar a los españoles que el CSD esté permitiendo todo esto, aún resulta más intolerable el escenario de chantaje en el que se está desarrollando. Es fácil demostrar que lo que está haciendo la federación vasca no es correcto, que hay un modus operandi con el PNV detrás y, por lo tanto, con los intereses independentistas de aquellos partidos que intentan fragmentar España. Y todo esto ocurre con la connivencia de un Gobierno que mira para otro lado, no solo por intereses políticos, sino porque encima tenemos al frente del Consejo a un señor que no ha sido llamado por el camino del trabajo y que no tiene la capacidad real para solventar esta situación.

-En la ya famosa Asamblea del pasado diciembre, Francia, Argentina y México votaron en contra de los intereses de España. ¿Está fallando también la diplomacia deportiva?

-Sin duda. Es algo que debería liderar el Ministerio de Educación, FP y Deporte. Pero, como digo, no hay nadie con conocimiento deportivo al frente capaz de zanjar un problema que acabará extendiéndose a otras federaciones y disciplinas. Ese es el melón que este Gobierno quiere abrir con sus socios. Y aquí es donde nosotros ponemos pie en pared y decimos que esta situación es la más grave que ha vivido el deporte español en décadas.

-¿Es posible ese efecto llamada si la Federación Vasca logra su objetivo?

-Obviamente, estamos muy preocupados. Lo que está ocurriendo es la felicidad de los independentistas, un ataque directo a la estabilidad de España. En otros ámbitos han cedido fronteras o han concedido prerrogativas. Ahora le ha llegado el turno al deporte, que también se está convirtiendo en moneda de cambio. El Gobierno busca fortalecer su legislatura mediante pactos con partidos que solo desean debilitar nuestra nación.

-¿Qué pasaría si el TAS no da la razón a la Federación Española?

-El problema no es el TAS, sino la aplicación de nuestra propia Ley del Deporte. El CSD puede, hoy mismo, paralizar todo esto simplemente negando la representatividad internacional a una federación autonómica.

-Pero la esperanza de la Federación Española no es esa, sino que prospere su recurso.

-Mi obligación es decirles a los españoles que el presidente del CSD tiene en su mano las herramientas legales para frenar esta ruptura del deporte español, pero no tiene ninguna intención política de hacerlo.

-En su caso, ¿piensan adoptar alguna medida de presión?

-Estamos utilizando al máximo las cámaras del Congreso y el Senado con todas las herramientas a nuestro alcance para, al menos, denunciar esta situación. Queremos que el Gobierno recapacite y comprenda que no se puede jugar con el deporte de esta manera. Estamos presentando una batería de iniciativas que se desarrollarán en los próximos días y semanas, y que nos permitirán alzar la voz y plantar cara. Nos preocupa el deporte español, sea pelota, surf o cualquier otra disciplina.