Comienza el juicio por la muerte de Diego Maradona en Argentina

Cuatro años después del fallecimiento de la leyenda del fútbol Diego Maradona, este martes arranca en Argentina el juicio por su muerte, que ha sido aplazado en varias ocasiones. Se va a tomar declaración a los siete profesionales de la salud imputados para determinar sus responsabilidades en los hechos.

La primera audiencia está prevista para las 09.30 horas locales (12.30 horas GMT). Será en los tribunales de la localidad de San Isidro, al norte de Buenos Aires.

Los siete miembros del equipo médico de Maradona que van a declarar son el neurocirujano Leopoldo Luciano Luque, la psiquiatra Agustina Cosachov, el psicólogo Carlos Ángel Díaz, la médica coordinadora Nancy Forlini, el coordinador de enfermeros Mariano Perroni, el médico clínico Pedro Pablo Di Spagna y el enfermero Ricardo Omar Almirón.

Todos ellos están acusados de «homicidio simple con dolo eventual», es decir sin premeditación pero en el que el homicida sabe que podría ocasionarle la muerte a alguien e igualmente continúa con su actuación. Podrían enfrentarse a entre ocho y 25 años de prisión.

De hecho, los fiscales han considerado que el ídolo del argentino Boca Juniors y del italiano Nápoles se encontraba «en situación de desamparo» y «librado a su suerte», sin la atención debida ante la gravedad del cuadro: «Hay un cúmulo de conductas penalmente relevantes que condujeron a Maradona a su triste fallecimiento», han afirmado.

Asimismo, un informe médico de mediados de 2021 sugirió que el tratamiento de Maradona había sido «inadecuado, deficiente y temerario».

En su petición de elevar la causa a juicio oral, el juez del caso, Orlando Díaz, cuestionó «la conducta que cada uno de los acusados habría desplegado, no cumpliendo con el mandato de actuar que la buena práctica médica colocaba en sus cabezas».

Los acusados niegan cualquier responsabilidad en la muerte la leyenda del fútbol mundial escudándose en su propia especialidad o tarea segmentada. De hecho, el abogado de la psiquiatra Cosachov, se ha mostrado, en declaraciones a AFP, «muy optimista respecto a una absolución»: «Mi defendida estaba velando por la salud mental de Maradona, pero él falleció por un evento cardíaco, por lo que de ninguna manera (ella) debería haber llegado a este juicio».

La enfermera Dahiana Gisela Madrid, la octava acusada, será juzgada de forma separada cuando termine este proceso, en un juicio por jurados a petición de su defensa.

Durante el juicio, que se espera que se alargue hasta el mes de julio, declararán cerca de 120 testigos, entre familiares, peritos y médicos de Maradona a lo largo de los años, informa AFP.

Los cinco hijos de Maradona y sus hermanas son los querellantes en la causa. Los familiares han fijado el foco en audios y mensajes escritos que se filtraron al inicio de la investigación, según los cuales «quedó claro que ellos (el equipo médico) sabían que si Diego seguía así, iba a morir», ha indicado Mario Baudry, abogado de Dieguito, uno de los hijos de Maradona. «A mi padre lo asesinaron», ha dicho de hecho este lunes en una entrevista en Antena 3.

Por su parte, dos de las hijas del «diez», Dalma y Gianinna, han pedido repetidamente en redes sociales «justicia» por la muerte de Maradona, una consigna a la que se han sumado miles de argentinos.

El carismático jugador falleció el 25 de noviembre de 2020 a los 60 años. Fue por una crisis cardiorrespiratoria cuando estaba ingresado en su domicilio particular en Tigre, al norte de Buenos Aires, recuperándose de una cirugía en la cabeza por un hematoma.

Según la autopsia, el héroe del Mundial de 1986 con la Albiceleste murió por un «edema pulmonar agudo secundario e insuficiencia cardíaca crónica agravada». Maradona padecía múltiples patologías: problemas renales, hepáticos, insuficiencia cardíaca, deterioro neurológico y dependencia del alcohol y psicofármacos.

Su muerte conmocionó al mundo deportivo y fue llorada por millones de argentinos. Hubo tres días de luto nacional y se realizó un multitudinario y emotivo velatorio en el palacio presidencial.