Un cartero ludópata le roba 9.000 euros a Evenepoel tras quedarse con su tarjeta de crédito
La fiscalía pide 18 meses de cárcel para el trabajador de Correos belga, que también estafó a otros vecinos de Schepdaal
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Definitivamente, Remco Evenepoel, doble campeón olímpico de ciclismo en los Juegos Olímpicos de París 2024, tiene mala suerte con los empleados del servicio de Correos de su país, Bélgica. Si hace poco más de un mes fue víctima de un accidente de tráfico provocado por un agente de dicho departamento, ahora un cartero le ha robado 9.000 euros de su cuenta corriente.
El pasado 3 de diciembre, mientras se entrenaba, el ciclista belga sufrió fracturas de costilla, omóplato y mano tras impactar con la puerta de una furgoneta de Correos abierta de forma imprudente por uno de los empleados que iba en el interior del vehículo. Como consecuencia de las citadas heridas, todavía no ha podido volver a subirse a una bicicleta.
Para mayor desgracia, días atrás, mientras se recuperaba en su casa, uno de los carteros que hacen la ruta habitual por el barrio de Schepdaal, municipio donde nació y en el que reside, se dedicó a sustraer varias cartas enviadas por los bancos a sus clientes conteniendo tarjetas de crédito y los correspondientes códigos PIN de cada una de ellas.
Según la noticia publicada por 'sudinfo.be', entre las víctimas se encuentra Evenepoel, con cuya tarjeta el cartero sustrajo 9.000 euros, casi la mitad de la cantidad total robada: 19.500 €.
La alarma saltó cuando una vecina de Schepdaal denunció la desaparición de su tarjeta bancaria. Después de solicitar una nueva, que tampoco recibió, notó retiradas de dinero sospechosas en su cuenta corriente, hecho que denunció a la policía. Las imágenes de las cámaras de vigilancia instaladas cerca de los cajeros automáticos mostraron que el cartero que tenía que haber entregado la correspondencia con las tarjetas se las había quedado y las estaba utilizando para su propio beneficio.
Según el informe de la fiscalía, el cartero, vecino de Anderlech, «usó las tarjetas robadas para financiar su adicción al juego. Luego, tras usarlas, tiró algunas y otras se las devolvió a sus titulares».
La fiscalía solicitó una pena de 18 meses de prisión. La defensa, por su parte, propone una pena de servicios comunitarios. «Mi cliente es plenamente consciente de la gravedad de sus acciones», afirmó su abogado.
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