25 años del fichaje de Maradona por el Sevilla FC
El 22 de septiembre de 1992 Luis Cuervas conseguía desbloquear en Zúrich la histórica llegada del astro argentino a Nervión
En la vasta historia del Sevilla , sensiblemente enriquecida en el presente siglo con el metal de los numerosos títulos, hay capítulos imborrables. El club puede presumir, sin ir más lejos, de haber contado en sus filas con el que fuera el mejor jugador del mundo. Todavía, para muchos, el mejor de toda la historia de este deporte. Y pese a que llegó a Nervión en los estertores de lo que había sido una carrera increíble. Hoy se cumplen 25 años del fichaje de Diego Armando Maradona por el Sevilla . Su incorporación fue un culebrón que duró casi tres meses, hasta que la entidad de Nervión consiguió el 22 de septiembre de 1992 que Corrado Ferlaino, el duro presidente del Nápoles , estampara su firma en el documento de traspaso del astro argentino a cambio de una cantidad de 7,5 millones de dólares.
El negocio fue tan complicado que hubo de cerrarse en la sede de la FIFA en Zúrich , en una reunión que se extendió por más de tres horas y en la que confrontaron el propio Ferlaino y el máximo dirigente sevillista, Luis Cuervas , bajo la supervisión de los responsables de las federaciones española e italiana, Ángel María Villar y Antonio Matarrese, respectivamente; así como toda la cohorte de asesores jurídicos de ambos clubes, entre los que se encontraba un joven José María del Nido. Cuando por fin se cerró el trato, no sin suspense, Maradona lo celebró por todo lo alto en el hotel donde se alojaba en Sevilla junto a toda su familia. La felicidad inundó también al sevillismo. A todo el club. El Sevilla, aquel 22 de septiembre, había conseguido un fichaje imposible.
Seis días después, el domingo 28, Diego se enfundó la camiseta del Sevilla en el Sánchez-Pizjuán. Era su regreso a un terreno de juego después de haber estado un año y medio sancionado por doping en Nápoles. Su mediática vuelta se produjo en un partido amistoso contra el Bayern Múnich . Los sevillistas, dirigidos por Carlos Salvador Bilardo y con Simeone también en sus filas, ganaron por 3-1 a la escuadra de Lothar Mathaus. Ya el 4 de octubre de 1992 llegó el debut en partido oficial. Fue en San Mamés . Maradona saltó al césped de La Catedral con el diez a la espalda y el brazalete de capitán para defender el escudo sevillista en LaLiga. Su imagen dio la vuelta al mundo. Aunque el recuerdo de aquel partido no fue el mejor, con una derrota en el último minuto (2-1). Sólo tres días después, Maradona disputó su primer encuentro oficial en el Sánchez-Pizjuán, con el mejor desenlace posible. Marcó el gol del triunfo sevillista ante el Real Zaragoza . Un tanto para la historia. Aquel choque dejó otra anécdota para el recuerdo. Casi al final del envite con los maños, al dirigirse Maradona a lanzar un córner, levantó con la bota una bola de papel de aluminio que había sobre el césped, la tocó un par de veces con el empeine y la sacó del terreno de juego con la espuela. Nervión se levantó de sus asientos.
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