Otra vez Pizarro Gómez
El árbitro que estuvo en el VAR en el Betis - Celta fue el mismo del derbi de octubre ante el Sevilla; ¿recuerdan la mano abajo de Diego Llorente, no? Pues eso...
Miren que este humilde redactor que les escribe no cree, de verdad que no, en conspiraciones arbitrales, pero lo de Pizarro Gómez con el Betis empieza a ser sospechoso. El domingo en el partido contra el Celta se saltó el protocolo. Así, del tirón. Porque ... el colegiado que está en al frente del VAR nunca puede arbitrar, o decidir directamente sobre una jugada, desde su asiento en la sala de la Ciudad del Fútbol de la RFEF. Sino que, según las reglas del vídeo arbitraje en el fútbol español, debe recomendar al árbitro de campo acudir a la pantalla que hay en el terreno de juego para que vea la acción en cuestión y que éste decida.
Ya ha debido de ser grave, gravísimo diría yo, el error del árbitro adscrito al Comité Madrileño, que influyó notabilísimamente en la decisión final de Ortiz Arias sobre el fuera de juego posicional (en este caso, no fuera de juego posicional) de Starfelt en el 0-1 del equipo vigués, que hasta algunos de los principales analistas arbitrales de radio y televisión (aunque lo que ha abierto programas deportivos ha sido el fallo del fuera de juego semiautomático con el gol mal anulado a Lewandowski) se han decantado claramente por el hecho de que el gol de Javi Rodríguez no debió subir al marcador.
Era el minuto 13 de juego y, en un partido tan igualado, una decisión de este tipo marca los encuentros. Y tanto que los marca.
Se da la casual, entre comillas, ya me entienden, circunstancia de que Pizarro Gómez fue el mismo árbitro que estuvo en el VAR en el derbi del pasado mes de octubre frente al Sevilla en Nervión. ¿Recuerdan el penalti por la mano abajo de Diego Llorente, no? Pues eso...
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